Ray, su mujer y su hija van de viaje
y paran en una estación de servicios donde ocurre un accidente. Ray lleva a su
familia al hospital, donde empieza una locura cuando su mujer y su hija
desaparecen…
Imagina que eres un ex alcohólico.
Imagina que tienes un accidente de coche con tu familia. Imagina que tu familia
desaparece. Imagina que nadie te cree, que han borrado tu presente y tu pasado…
y te hacen dudar… y ahora imagina que nada es lo que parece.
Me tuvo enganchada, cumplió su
función. No es el mejor thriller del año pero me gusto lo suficiente como para
tenerme sin apartar la vista de la pantalla en su total duración. Quizás el
principio es un poco flojo, pero va mejorando con el paso de los minutos.
Lo que más me gusto es el final. Un
final que te deja pensando en lo que ha pasado, en lo que has visto y cuál es
la realidad más lógica. Sinceramente me sorprendió satisfactoriamente el cierre
de la película.
La recomiendo con un bol grande de
palomitas al lado y poniendo los cinco sentidos en la historia.
Mi puntuación es de 7.
LO MEJOR: El desenlace.
LO PEOR: Las criticas… no le hacen justicia.
DIRECTOR: Brad Anderson.
REPARTO: Sam Worthington, Lily Rabe,
Stephen Tobolowsky, Adjoa Andoh, Lucy Capri, Lauren Cochrane…
AÑO: 2019.
Foto: Filmaffinity
No hay comentarios:
Publicar un comentario